El hijo del presidente, el largometraje de ficción número 21 del realizador venezolano Jackson Gutiérrez, llegará este viernes 3 de agosto a los circuitos comerciales de exhibición en Valencia, Maracay, Barquisimeto, Caracas, Maracaibo y Puerto La Cruz, para luego continuar el recorrido por otras ciudades nacionales, antes de visitar otros países de Latinoamérica.
Texto: Correo del Orinoco
Aunque mantiene el sello de Jackson Gutiérrez caracterizado por la acción sustentada en violencia del barrio, las armas, el plomo y las figuras voluptuosas, en El hijo del presidente el realizador autodidacta que escribe y actúa en sus propias películas le da un giro a la temática para abrirle resquicios al romance, rincones al humor y una plaza a la reflexión sobre la responsabilidad de los sectores de poder en relación con la sociedad, el encuentro, la unión y la comprensión en función de la resolución de problemas colectivos
En cualquier parte
Consciente de que el título puede suscitar polémicas, en conversación con el Correo del Orinoco el director de cintas como Azotes de barrio, Complot, Caracas las dos caras y Cuatro esquinas, entre otras, se adelanta a advertir que El hijo del presidente es un filme completamente de ficción en el cual se desarrolla una historia que, a su entender, puede ocurrir en cualquier país de Latinoamérica.
Si bien en la historia se hacen dos breves referencias a Venezuela, el realizador insiste en que la intención fue hilvanar una historia de ficción susceptible de encajar en cualquier realidad latinoamericana.
La cinta se rodó en las localidades caraqueñas de Chapellín y en el Palacio de las Academias. “Claro que tiene el sello venezolano, es venezolana, tiene mi sello personal también (como autor)”, pero no tiene ninguna indicación clara de referencia de lugar y la intención “era hacer algo para el público latinoamericano en general”, apunto el director guionista y actor.
La acción
En el filme, Pedro, el hijo del presidente, es sonsacado por su mejor amigo para salir a rumbear. A medida que la noche avanza, la fiesta se calienta y el alcohol invade sus emociones, Pedro se desinhibe y comienza a lanzar dólares al aire, paga la cuenta a todos los asistentes en un local nocturno y se deja llevar por la belleza de Yuly, quien lo convence, a pesar de las advertencias del escolta del hijo del presidente, de continuar la diversión en una fiesta privada.
Sin saber quién es exactamente su víctima, Yuly conduce a Pedro, junto a su mejor amigo y su escolta a un secuestro.
Luego de enterarse por los medios de comunicación de la identidad del plagiado, los captores cambian la estrategia y deciden darle una buena lección a Pedro que nunca olvidará.
Diferente
Como el propio autor lo admite e insiste, El hijo del presidente es una propuesta diferente de sus películas anteriores. En esta oportunidad parte de la intencionalidad es “hacer un llamado a la conciencia a los venezolanos, con un mensaje de unión, de unificación. Es una película llena de amor, de humor, drama, acción suspenso, va a gustar mucho en nuestro público venezolano”, estimó el director.
“El hijo del presidente conoce un ambiente muy diferente al que está acostumbrado a vivir. En este ambiente se consigue con el bien y el mal en una historia bastante compleja en la que el protagonista pasa por una mala situación y llega a una buena situación. Es un recorrido que lo lleva a un sitio que puede ser cualquier barrio latino y toma conciencia y al ver la situación que presentan estos barrios”, describió Jackson Gutiérrez.
Al igual que las obras anteriores de este director, El hijo del presidente está hecha bajo el concepto del cine guerrilla, con recursos completamente independientes.
Experimentados y debutantes
El elenco esta encabezado por Luciano Muguerza, quien interpreta a Pedro, mientras que Érika Schwarzgruber encarna a Yuly. Los roles de la pareja presidencial los ejercen Lula Bertucci y el primer actor Julio Alcázar.
También forman parte del equipo actoral Karlis Romero, Jackson Gutiérrez, Karina Jaimes, Antonio Delli, Irvin Coronel, Vladimir Mussot, Astri Velázquez, Robert García, Francisco González, Gaby Mezone, Leonela Seco.
El casting fue dirigido por Francisco González, quien además hizo el trabajo de preparador de actores. No obstante, en una rueda de prensa antes de la premier de la película, el director admitió que desde la escritura del guión ya tenía previsto quienes serían los intérpretes. “Yo hice la selección de actores. Logramos hacer algo bastante positivo que mucha gente va a disfrutar”, declaró.
En relación a su trabajo de preparador de actores en un grupo conformado tanto por debutantes como histriones de larga trayectoria, incluyendo profesionales con experiencias medianamente extensas, González contó que durante el proceso de selección se escogieron actrices y actores “con intuición e inteligencia” capaces de entender las indicaciones en poco tiempo.
Como no se contaba con mucho tiempo de preparación para comenzar a rodar, “lo que se hizo fue usar los recursos que ellos (las actrices y actores) tenían para aportar al rodaje”, admitió González, quien también fue productor del filme.
Tomado de: Un mensaje de unión y comprensión propone la película El hijo del presidente
No hay comentarios:
Publicar un comentario