Texto: Prensa CNH
La tercera sesión del coloquio, realizado en la Casa de la Historia Insurgente ubicada en la avenida Universidad, a través del CNH -ente adscrito al Ministerio del Poder Popular del Despacho de la Presidencia y Seguimiento de la Gestión de Gobierno- y el Instituto de Altos Estudios “Hugo Chávez”, contó con las intervenciones del profesor Franco, así como del político, abogado y diplomático venezolano Roy Chaderton, la moderación del presidente del CNH, Pedro Calzadilla, y la participación especial del arquitecto Fruto Vivas.
El coloquio abordó la política expansiva y arbitraria que lleva a cabo Estados Unidos en contra de los países latinoamericanos.
Chaderton realizó una retrospectiva personal enfocada en su trayectoria política juvenil, con el objetivo de demostrar la presencia e intromisión del gobierno estadounidense en materia política y económica durante comienzos de los años 60 y los años siguientes. Comentó que es hijo de padres izquierdistas, quienes fueron perseguidos durante la dictadura del General Marcos Pérez Jiménez, fue militante del partido socialcristiano Copei y llegó a ejercer la diplomacia hasta ser designado embajador de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos (OEA).
“Cuando cae el General Pérez Jiménez, mi familia se fue al exilio, todos militaban por la causa comunista. A los 8 años recuerdo haber visto a Teodoro Petkoff conspirando con mi madre en la casa”, narró.
Sobre la represión de los años 60, Chaderton hizo una diferencia con el gobierno de facto que vivió en su niñez: “La dictadura de Marcos Pérez Jiménez mató y robó menos que en la posterior democracia. No hubo desaparecidos al nivel del bipartidismo adeco-copeyano”.
La intervención del diplomático estuvo amenizada con su buen sentido del humor y agudas reflexiones.
Hizo un llamado al pueblo venezolano a estar atento y “desablandecerse” con los Estados Unidos, ser más incisivo y menos resignado.
“Venezuela es una democracia con justicia social, solidaria rebelde y resistente y por lo tanto una guía, una luz, un faro para la mayoría de los países que puedan encontrarse en una situación de esas que nos hacen familia”, acotó.
El coloquio culminó con la relectura del manifiesto escrito por el arquitecto Fruto Vivas en el año 2014, cuando le fue otorgada la Orden Libertadores de la mano del presidente Nicolás Maduro, en el texto hace un llamado a la paz, a la protección de la vida humana, la fauna, los bosques, los mares y legar a las nuevas generaciones lo que nos queda de tierra para seguir existiendo y construyendo el futuro.
Se invita a todo el público al cuarto y último coloquio a realizarse el día jueves 28 de septiembre a partir de las 9 de la mañana en la Casa de la Historia Insurgente ubicada en la esquina de Traposos, en la avenida Universidad.
Tomado de: Chaderton: Debemos “desablandecernos” con los Estados Unidos
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