A diferencia de años anteriores, El Cascanueces iniciará la temporada navideña dentro de las instalaciones del Teatro Municipal los días 2, 3, 4, 9, 10 y 11 de noviembre a cargo del elenco de bailarinas y bailarines, pertenecientes a la escuela de Ballet Clásico de la maestra Rita Dordelly, bajo su misma dirección.
Texto: Ciudad Caracas
Esta puesta en escena logra subir el telón para los espectadores amantes del ballet clásico y de toda la familia que desde hace 22 años han acudido a las butacas del Teatro Teresa Carreño para deleitarse con la obra del maestro Tchaikovsky. Es una obra que ha trascendido el tiempo, sin fronteras, llegando por primera vez al país de la mano del bailarín y coreógrafo Vicente Nebrada en 1996, quien la tansformó en éxitos y oportunidades para generaciones de bailarines de la danza clásica criolla.
No hay Navidad sin Tchaikovsky
Crecí junto a cada presentación de El Cascanueces, donde un cuento de Navidad cobra vida. Es tan tradicional como mágica. Originalmente por Ernst Theodor Amadeus Hoffmann en 1816, genera pasión hacia la danza a más de un infante, e incluso a los no tan jóvenes.
Esta historia se divide en dos actos, en donde se relata cómo un regalo llega a manos de la joven Clara en la noche de Navidad (un cascanueces, objeto que es humanizado), y que luego de derrotar al Rey Ratón la lleva a un reino mágico poblado por muñecos, hadas, ambientado por un repertorio musical del inmortal compositor ruso Piotr Ilich Tchaikovsky.
La vocación de una bailarina emprendedora
Rita Dordelly es madre de dos futuros bailarines y directora de su propia escuela de ballet, donde tiene una matrícula de más de 80 estudiantes. Es egresada de la Escuela de Ballet Clásico del Zulia y tiene diferentes especializaciones en docencia artística. Siempre busca expandir su aprendizaje y dedicación, la cual recibió de sus maestros Vicente Nebrada y Guillermo Gonzalez, actual director del ballet juvenil del Teresa Carreño. ”El Teatro Teresa Carreño fue mi casa, y el amor por los detalles dentro de la puesta en escena y a nivel coreográfico vino de mis maestros”, agregó Dordelly.
Este proyecto nace desde hace algún tiempo, pero a partir del 2012 la escuela está activa. La directora considera que el trabajo artístico y de formación académica que se hace en Caracas y en el resto del país es maravilloso: “Hay mucho talento en Venezuela, y no es desde ahora, viene de siempre”, concluye Rita muy risueña. Incluso derrumba ese mito del ballet con respecto a los adultos que “están pasados de horno” pero que buscan bailar: su escuela tiene las puertas abiertas para quienes deseen incursionar con dedicación y esfuerzo.
El venir de una generación de bailarines imponentes le da orgullo para dejar sus enseñanzas a su familia danzante, honor que se incrementa cada vez que su elenco se esmera y presenta y que con sus técnicas, amor, y profesionalismo harán de esta temporada de tutú y zapatillas los recuerdos más bonitos para los asistentes, equipo técnico y toda su escuela.
De planes a hechos
La Alcaldía del Municipio Libertador, y el trabajo de Charles Arrias a través del impulso cultural dio la oportunidad a este elenco de bailar una pieza en el Teatro Municipal, para ofrecer disfrute a todos los caraqueños, de otra versión de El Cascanueces, pero que mantiene la finura y delicadeza del realce técnico que precede de la Fundación Teatro Teresa Carreño.
La puesta en escena no ignora ningún detalle que encierra el cuento mágico: el proceso de utilería, luces, telones, y vestuario son gracias al trabajo en conjunto de diversos representantes, abuelitas y ayuda de diferentes entes que resurgieron junto a Dordelly. Las entradas, a precios accesibles, ya están a la venta en las taquillas del teatro.
Con la danza en el corazón
Rita Dordelly ejerce como maestra de ballet desde los 14 años, y se esfuerza diariamente por continuar enseñando. Insiste en que cada alumna que ingresa a su escuela le permite expandir y crear más habilidades pedagógicas que se manifiestan en sus presentaciones.
Su escuela trabaja en horarios extendidos para fomentar a sus bailarines el trabajo en equipo y un carácter responsable, como si se tratase de una compañía de ballet, pero aún así permanece como un santuario de paz artístico para todo el elenco.
Tomado de: El Cascanueces llegará al Municipal por primera vez
No hay comentarios:
Publicar un comentario