Texto: Prensa MPPC
Los asistentes se apostaron en la entrada del lugar, aproximadamente dos horas antes del encuentro y fue a las 11:00 de la mañana cuando comenzó el espectáculo. Con aplausos y ovaciones del público, la artista comenzó agradeciendo la presencia de todos.
“Estoy muy feliz de estar aquí y de poder reencontrarme con mi público venezolano. Antonio Estévez, es un insigne compositor y músico. Y, realmente, estoy muy agradecida que hayan aceptado mi propuesta de hacer este concierto”, subrayó.Como antesala a lo que serían las piezas de Antonio Estévez, la pianista dedicó la primera parte de su presentación a varios músicos reconocidos. Entre ellos, Aldemaro Romero con Retrato Solemnísimo y Adrián Suárez con Dos estelas y el bandolín de Cochécoto en estreno mundial.
Romero murió en 2007 y es recordado por ser el creador de un nuevo estilo de música venezolana llamado la “Onda Nueva” y Suárez es un joven compositor nacional que se inicia con estas dos obras en el lenguaje tonal.
Luego, con la dinastía Estévez, como ella los presentó, Rodríguez comenzó la segunda parte del recital, ahora sí para recordar al compositor venezolano a través de una de sus famosas obras musicales: 17 piezas infantiles.
Acá fue acompañada por el guitarrista Miguel Delgado Estévez, sobrino del homenajeado, quien se encargó de recordarlo aclarando que el motivo del concierto era la celebración del centenario del nacimiento de su tío, oriundo de Guárico y quien murió el 26 de noviembre de 1988.
“Mucho se ha escrito sobre las 17 piezas infantiles de nuestro maestro. Estas son pequeñas joyas musicales que a pesar de su dificultad para tocarlas, no pierden la esencia de la niñez. Este es un trabajo que nos debe llenar de orgullo a todos nosotros”, explicó Delgado.
De esta manera, la pianista dio inicio a las tonadas acompañando cada una de ellas con epígrafes, recitados por Delgado, de ilustres poetas venezolanos como Jacinto Fombona Pachano, Fernando Paz Castillo y Andrés Eloy Blanco.
Después de esto, comenzó la tercera parte del recital donde la pianista se hizo acompañar por otros dos destacados maestros de la música nacional: el cuatrista Eduardo Ramírez y el compositor y acordeonista Federico Ruiz.
En este segmento del concierto el público pudo disfrutar de obras musicales como: Odeon de Ernesto Nazareth, El negro José de Aldemaro Romero, Alfonsina y el mar de Ariel Ramírez y Carmen Rosa de Federico Ruiz.
Fueron dos horas de puro piano. La célebre pianista y sus destacados músicos acompañantes supieron rememorar el talento de Antonio Estévez y su inigualable capacidad de retratar la cotidianidad y el llano venezolano.
“Como todos saben, yo vivo en Londres, pero siempre regreso a Venezuela por lo menos una vez al año y que gran placer poder hacerlo esta vez de la mano de estos tres grandes músicos. Nos volveremos a ver. Los quiero mucho”, finalizó la interprete.
Un público agradecido
No quedó una butaca sin ocupar. 400 personas se dieron cita en este magno evento que sirvió para rescatar la vida y obra del ilustre compositor venezolano
La caraqueña Andreína Yépez, expresó que “este tipo de actividades es maravillosa porque nos permite conocer nuestras raíces, nuestros ancestros y nuestra música. Yo soy músico y coralista y venir a apreciar este recital ha sido muy lindo porque el maestro Estévez significa mucho para la música venezolana. Además, Clara es una magnifica intérprete”.
Samuel Bravo habitante de Caracas, destacó que “fue un concierto maravilloso. Las notas hablaron por sí sola. Clara es un orgullo para nosotros porque es una intérprete de gran nivel y qué mejor manera de regalarnos su talento a través de las piezas de grandes compositores venezolanos y de la mano de Antonio Estévez.”
María Rangel, residente de la Urbanización Las Palmas y nacida en el estado Delta Amacuro quien sugirió que estos proyectos se deben realizar con más frecuencia.
“Me gustaron todas la piezas que se tocaron. Este tipo de evento es algo que recrea el alma y el espíritu. El maestro Estévez es parte de nuestra cultura, porque sus piezas nos hacen evocar lo maravillosa que fue y es Venezuela”, aseveró.
Asimismo, José García, vecino de la comunidad de La Boyera, manifestó sentirse muy feliz porque se estén realizando este tipo de conciertos donde se rescatan las raíces venezolanas. “Estas iniciativas hacen falta porque es necesario que la juventud conozca a quienes trabajaron tanto tiempo por mantener la música venezolana en lo más alto del reconocimiento mundial. Este concierto fue maravilloso”, esbozó con gran alegría.
La poeta del piano
Clara Rodríguez es una destacada pianista venezolana, reconocida en los cinco continentes. Su talento empezó a florecer desde los 7 años edad cuando conoce a su primera profesora de piano. Desde entonces, no pudo apartarse de las obras de Bach, Mozart, Beethoven, Chopin, Scarlatti y Couperin.
También es conocida como La poeta del piano, apodo con el que Antonio Estévez la bautizó y catapultó como una de las figuras más prometedoras de la música nacional. Actualmente, vive en Londres donde reside desde hace 17 años y ha grabado cinco discos de obras para piano.
Su trabajo se ha caracterizado por impulsar la música venezolana en todos los países que ha visitado. Piezas de Federico Ruiz comoLa peruanita y Canción para dormir a una muñeca de Antonio Estévez se han podido disfrutar en muchos teatros internacionales y han logrado convertirse en obras de estudio por solistas de todo el mundo gracias al trabajo y dedicación de esta insigne pianista.
Tomado de: Con epígrafes al son del piano Clara Rodríguez interpretó joyas musicales de Antonio Estévez
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